Las Hogueras del 29
Hace 90 años de la segunda edición de las Hogueras de San Juan, y Benjamín Llorens nos trae el recuerdo de los festejos alicantinos a través de publicaciones de la época.
Era la segunda edición de las novedosas fiestas de Hogueras de San Juan, las cosas aún estaban manga por hombro, un poco verdes. Naturalmente no había tradición, no como ahora que se cumplen 90 años de aquella segunda plantá, en la que se levantaron 19 monumentos o -mejor dicho- 17 fogueres y 2 fogueretes.
Varios días antes de que las hogueras hicieran su aparición por segunda vez en las calles alicantinas, la prensa de la terreta publicaba anuncios para promocionar la fiesta.
Diario de Alicante.
Prácticamente sin grafismo y con un lenguaje simple era como se anunciaban en la prensa las hogueras del 29. Para referirse a la plantá y cremá se decía "instalación y cremación". Con el tiempo todo se iría puliendo, también las actividades festeras. Por aquel entonces había hogueras y tropecientas cosas más, herencia de los tradicionales (y llamados a morir) festejos de verano e invierno. Conciertos, corridas de toros, pólvora, concursos, verbenas..."y otros regocijos populares".
En los días previos a la plantá los periódicos locales animaban a las comisiones fogueriles a una mayor coordinación para evitar errores y fracasos. Ya se planteaba la necesidad de un organismo que aglutinara a las hogueras. Se estaba pidiendo lo que luego sería la Comisión Gestora de les Fogueres.
En aquella segunda edición de Fogueres de San Chuan volvió a visitarnos un tropel de humoristas de moda provenientes de Madrid donde triunfaban en diferentes publicaciones diarias o semanales. El popular Gutierrez, jefe del Negociado de Incobrables de la Dirección General de Cuentas Atrasadas, envió desde la capital un comunicado a la prensa alicantina anunciando su llegada para hogueras. Con él vendrían los populares K-Hito, Roberto, Abellán y Xaudaró.
Diario de Alicante (caricaturas de Lorenzo Aguirre).
El viernes 21 de junio todas las comisiones se afanaban en los preparativos de la plantá. Trabajo y animación nocturnas en los barrios (se plantaban diez monumentos más que el año anterior) hacían más llevadera la ardua tarea de poner en pie les fogueres a su debido tiempo, pues al amanecer del sábado todas debían estar plantadas. A las 9 y media de la mañana comenzaba el desfile de bandas por el centro de la ciudad, pero no todas las hogueras habían podido hacer la plantá sin incidentes, varias se terminaron a lo largo de la mañana y algunas incluso por la tarde. Tras el desfile de bandas, al mediodía dieron comienzo los festejos en los barrios, alrededor de cada hoguera, con música y pólvora como protagonistas.
En su edición de aquel sábado 22 de junio (en este 2019 las fechas caen exactamente igual que entonces), El Día editorializaba sobre la nueva fiesta alicantina de las Hogueras de San Juan:
"Como si el poder de una voz milagrosa le hubiese infundido su fuerza y su vida, Alicante se levanta hoy con gesto de coloso. La ciudad presenta el aspecto magnífico de una gran urbe. De todas las partes de la provincia, de todos nuestros pueblos, no cesan de llegar viajeros...No son pocos los que llegan de otras provincias y son numerosos los que proceden del Africa francesa y de nuestra zona de protectorado en Marruecos. Alicante les recibe con los brazos abiertos, porque Alicante es la casa de todos. No encontrará nadie corazón tan noble, tan expansivo, tan amparador, como el de esta población hidalga y liberal".
Cartel oficial de Hogueras 1929, obra de Lorenzo Aguirre (AMA)
A la estación de Madrid llegó el Jefe de Incobrables, el popular Gutiérrez, como avanzadilla del resto de humoristas que arribarían para San Juan. Fue recibido a pie de andén por 3 bandas de música, dolzaina y tabalet, grupos de nanos y un numeroso gentío. Se formó una comitiva que, tras pasar por el Ayuntamiento (el protocolo manda), desembocó en la Rambla a los sones de una monumental y estruendosa traca. En la redacción del Diario de Alicante se les ofreció un "piscolabis alicantino", a base de "coques en toñina, vinos de la terreta y rollets morenets en aigua sivá".
Aquel sábado por la tarde la afluencia de viajeros en los trenes fue enorme y continuó a buen ritmo en la mañana del domingo 23. Desde la reaparición de Belmonte cuatro años antes, en 1925, cuando aún no existían las Hogueras, no se veían tan concurridas las calles de la terreta. "Cafés, hoteles, bares y restaurantes estuvieron atestados todo el día y los tranvías, autos y coches de alquiler hicieron su agosto", señalaba El Luchador.
Portada de El Día (22 junio 1929)
El jurado oficial que otorgaba los premios estaba compuesto por Vicente Bañuls, Ramón Guilabert, Roberto Vañó, Manuel Cantos, Eduardo Irles, Manuel Navarro y Carlos Romero. Entre todos decidieron proclamar ganadora a la foguera de la plaza Chapí, siendo el segundo premio para la plaza del Puente y el tercero para Benalúa, triunfadora en la primera edición.
Ademas de estas tres, plantaron los distritos de Carolinas Bajas, Barrio San Antón, Calderón de la Barca, Plaza Reina Victoria (actual foguera Calvo Sotelo), Carolinas Altas, Alfonso XII (hoy plaza Ayuntamiento, foguera oficial), Mercado Central, Benito Pérez Galdós, Plaza Juan Poveda (actual de San Cristóbal), Alfonso el Sabio, Plaza Hernán Cortés, Rambla Méndez Núñez, Barrio Obrero y Plaza Isabel II (actual Gabriel Miró). Hubo otros dos monumentos plantados por particulares en las calles Maestro Bretón y San Vicente, pero a estos se les consideró más fogueretes que fogueres, debido a su escasa enjundia.
Hoguera Plaza Ruperto Chapí, primer premio 1929 (AMA)
Las 1500 pesetas del primer premio fueron para la hoguera ideada por el pintor Heliodoro Guillén “Tengo tres lunares”, crítica urbanística de algunas ruinas y abandonos en la vía pública. “Los lunares de Alicante”, como también era conocida la hoguera, hacían referencia a edificios ruinosos en la propia Explanada o solares abandonados en pleno centro. El remate era una reproducción del Benacantil con su castillo de Santa Bárbara.
Hoguera Plaza del Puente, 2º premio 1929 (AMA)
Bajo la Cara del Moro los vecinos de los barrios de San Roque y Villavieja sufragaron la foguera que se plantó en la Plaza del Puente y que se llevó las 750 pesetas del 2º premio. Era obra de Gastón Castelló y Paco Hernandez. Con el lema “El futuro Benacantil” representaba a éste convertido en un parque de atracciones al estilo del Tibidabo barcelonés. Un tren-cremallera uniría la playa con el castillo discurriendo por la ladera del monte, con espacios deportivos y un hotel en el interior de la fortaleza que incluso tenia nombre: Hotel Majestic.
Hoguera Benalúa, tercer premio 1929 (AMA).
Para el barrio de Benalúa se fueron a parar las 500 pesetas del tercer premio. Su lema “De enero a enero”. El boceto había sido realizado por el tesorero de la comisión Juan Such, los propios comisionados levantaron el monumento, que representaba diversas actividades económicas tales como el Comercio, la Agricultura y la Industria, que aparecían en manos de la Banca “ese otro factor económico importante, dueño de todos”, apuntaba El Luchador.
En la noche del lunes 24 las Hogueras de San Juan ardieron por segunda vez en Alicante, ya no hubo más fiestas de verano o invierno con carácter oficial. Les Fogueres se constituyeron en los festejos oficiales de Alicante... sucedió hace 90 años.
Fuentes e Imágenes:
*Archivo Municipal de Alicante (AMA)
*Biblioteca virtual de la prensa histórica (ministerio de Cultura)
*Diario de Alicante
*El Luchador
*El Día.